Los cuerpos calcinados corresponden a un hombre de 65 años, quien sería el cuidador del recinto, y una mujer de 67 años, dueña del inmueble, ambos presentando impactos balísticos.
Desde la Fiscalía se encuentran investigando una posible intencionalidad en los hechos.
Los hechos ocurrieron en 2019, cuando la víctima tenía 15 años.
El deportista de 46 años estaba desaparecido desde el pasado 19 de junio.
El hombre de 46 años, ingresó al Parque Villarrica sin registrarse, portando tabla y raquetas.
Los sujetos fueron capturados tras acudir a un centro asistencial.
La víctima, mantuvo amistad con José y Benjamín Curin, padre e hijo que fueron asesinados a balazos en 2022 por un posible ajuste de cuentas.
Hasta el momento las llamas han consumido más de tres hectáreas.
De igual forma, se han detenido las bombas de piroclasto, que cayeron algunos días en la ladera del cráter.
El hombre habría prestado declaración y su relato no coincidiría con los antecedentes recabados hasta el momento.
Las víctimas habrían sido atropelladas por un vehículo que se dio a la fuga.
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El Fisco y el Municipio deberán de manera conjunta pagar cerca de 23 millones de pesos a la afectada.
El funcionario fue suspendido de sus funciones.