El hecho ocurrió pasado el mediodía de este sábado en la intersección de la Avenida Diego Portales con Alameda.
Asimismo, agregó que “Los empresarios que miran el asunto en detalle han llegado a la conclusión de que ninguno de los proyectos que se han planteado cambian la situación de la inversión extranjera”.
El mandatario hizo un llamado a la centro derecha a buscar acuerdo para salvar el proceso.
“Esto de que portarse mal pueda llegar a ser inconstitucional, la verdad es que es un mal chiste”.
Bajo esa línea, acusó que los convencionales estuvieron “presos de un cuarto poder que modificó la decisión de la ciudadanía instalando una cuestión más poderosa, que es el miedo”.
“El país no puede seguir como está”, remarcó el alcalde de Recoleta.
La Cámara baja tendrá una semana para tramitar el proyecto.
Se espera que el proyecto pase la próxima semana a la Sala.
“Estoy dispuesto a que me digan traidor, que me funen, con tal de que Chile pueda poner la pelota al piso en el tema constitucional”, aseguró el senador.