Ministerio Público señaló que hay 167 personas investigadas, de las cuales 96 son sacerdotes y siete son obispos. En cuanto a las víctimas, cifra llega a 178.
Una de estas denuncias generó que la Fiscalía solicitara al Vaticano la entrega de mayores antecedentes respecto a investigaciones internas realizadas con anterioridad.