La captura se efectuó en el Terminal de Buses de Iquique, cuando el imputado intentaba escapar hacia Bolivia.
Los restos están siendo periciados para determinar su identidad.
Se trata de un contrato por 220 millones de pesos entre la Seremía de Transportes de la Región de Valparaíso, el Gobierno Regional y una empresa privada por medio de una licitación.
Los hechos tuvieron lugar en julio del año 2020, durante el debate por el proyecto del primer retiro de los fondos previsionales.
Durante la cuenta pública, también se dio a conocer que los femicidios en la zona tuvieron durante el 2021 un aumento del 65% en relación al año anterior.