La droga fue avaluada en más de 31 millones de pesos.
Antecedentes indican que el sujeto es el encargado de administrar y comercializar estupefacientes en la ciudad de Villavicencio. Pretendía ingresar por el complejo fronterizo Chacalluta.
El detenido, cuyas características físicas no concordaban con la persona del carnet, al verse presionado por las preguntas del detective, se vio en la obligación de confesar que no era él.
Tras las dudas de la PDI respecto a la veracidad del relato del sujeto, fue interrogado y confesó que ingresó de manera ilegal a Chile y que el de la documentación presentada no era él.
Efectivos de Policía Internacional descubrieron el engaño cuando el sujeto intentó hacer trámites migratorios con el documento de otra persona.