El parlamentario UDI anunció que oficiará al municipio para conocer si el inmueble se encontraba con riesgo de derrumbe, recordando que el año pasado la administración porteña desperdició casi $700 millones aprobados en la Ley de Presupuestos para justamente avanzar en la demolición de edificios.
El nuevo dueño del local adelantó que la carta tendrá dos tragos nuevos: el «Santiago Wanderers» y el «Oro y cielo».