La retención de líquidos o edema es un aumento de volumen causado por fluidos atrapados en los tejidos del cuerpo.  Por lo general se trata de una situación común que no representa necesariamente una enfermedad. Sin embargo, se debe estar atento y consultar con un especialista en caso de sentir dolor, irritación o calor en la zona hinchada, ya que podría relacionarse con problemas en el corazón o riñones.

De acuerdo al médico internista de Clínica Vespucio, Dr. Daniel Bunout, existen varios mitos en torno a la retención de líquidos, por lo que a continuación nos aclara los más comunes:

  1. No es normal que el cuerpo retenga líquidos.

Falso. Es normal retener líquido, teniendo en cuenta que el 70% de nuestro cuerpo es pura agua. Sin embargo, se debe estar atento a las alertas mencionadas por el Dr. Bunout, ya que en caso de presentarse asociado a dolor podría estar relacionada con alguna enfermedad.

  1. Con la edad retenemos más líquido, especialmente las mujeres después del primer hijo.

Verdadero. El embarazo y la edad son  factores de riesgo para este mal. Se debe tener en cuenta que con el paso de los años, se suele hacer menos ejercicio físico y se aumenta la permeabilidad de los capilares, por lo que la probabilidad de padecer este problema es mayor.

  1. Los viajes largos en avión, bus o auto pueden favorecer este problema.

Verdadero. Al estar muchas horas sentado con los pies hacia abajo, se produce presión en las extremidades inferiores causando la hinchazón.

  1. La retención de líquidos tiene algunos aspectos positivos como el mantener la piel hidratada y el pelo firme, además de contribuir en la cicatrización de heridas.

Falso. Esta afirmación no tiene ninguna base biológica que la sustente.

  1. La retención de líquidos aumenta con el uso de ciertos medicamentos.

Verdadero. Hay algunos medicamentos, como aquellos para bajar la presión, que pueden causar edema. Si hay alguna duda, se debe consultar con el médico tratante.

  1. Tomar bebidas durante el día ayuda a evitar la retención.

Falso. Las minerales y bebidas gaseosas no sirven para este fin, tampoco el café y los jugos artificiales, ya que los riñones no pueden procesarlos de la misma manera como lo hacen con el agua pura, de la que se debe beber al menos dos litros por día.

  1. Fumar puede agravar este problema.

Verdadero. La nicotina interfiere en la permeabilidad capilar, y por lo tanto uno de sus efectos secundarios es el de la retención de líquidos.

  1. Evitar los alimentos que contengan sodio es una buena forma de prevenir la retención.

Verdadero. El exceso de sodio obliga al cuerpo a retener agua para diluirlo y aumenta la presión arterial. Se debe tener en cuenta que no todo este compuesto se ingiere a través de la sal de mesa; todos los alimentos la contienen en mayor o menor proporción, por lo que es necesario evitar los que tengan más cantidad como embutidos y quesos, por ejemplo.