Cuarenta y cinco familias afectadas por el siniestro a partir del lunes 6 de abril recibirán sus nuevas viviendas y cerrarán por completo su proceso de reconstrucción.

Hasta el sector de Belloto en la comuna de Quilpue llegaron  familias damnificadas del incendio de Valparaíso en compañía del Delegado Presidencial para la Reconstrucción Andrés Silva, para visitar y recorrer sus nuevas viviendas, las que podrán ser ocupadas a partir del lunes 6 de abril.

Se trata de 45 grupos familiares que en su mayoría no eran propietarios de terrenos en la zona afectada por el incendio y que antes del siniestro vívían en condición de allegados o arrendatarios, con precarias condiciones de urbanización y habitabiliadad. Dentro del grupo también existen algunos propietarios de terrenos que decidieron cederlos al SERVIU por estar ubicados en zonas de riesgo y no ser segura la reconstrucción en el mismo lugar.

Los nuevos departamentos fueron seleccionados libremente por cada una de las familias, de entre las distintas alternativas de solución habitacional que los damnificados de Valparaíso han podido acceder gracias al otorgamiento de un subsidio especialmente creado para atender la catastrofe y que durante un año permitió que los afectados adquirieran viviendas nuevas, usadas, terminadas o en construcción por un valor de hasta UF 900 en cualquier lugar de Chile.

“Tras el incendio dispusimos de todos los instrumentos que la política habitacional establece, adecuandolos a la realidad y necesidades de las familias afectadas de manera de facilitar la entrega de soluciones definitivas rápidas, efectivas y de calidad a cada una de ellas, lo que nos ha permitido que  en un año ya sean más de 600 las familias que han cerrado por completo su proceso de reconstrucción porque se encuentran habitando sus nuevas viviendas” señaló el Delegado.

Los nuevos departamentos están ubicados en el Condominio Estrella del Norte en el sector de Belloto en Quilpué, que cuenta con espacios comunes, acceso controlado con portón automático 56 m2, tres dormitorios, un baño, ceramicos en dormitorio y living comedor, además de cocina con loggia incorporada.

LA BANDERA DE DICHATO

Entre las cinco familias que conocieron sus nuevas viviendas destaca el caso de Viviana Valdebenito Vidal, damnificada del Cerro La Cruz del sector de Tiro al Blanco, quien junto a sus dos hijos dejará su vivienda de emergencia ubicada una ocupación irregular para iniciar una nueva vida en Quilpué, comuna en la que sus hijos ya iniciaron el año escolar y asisten regularmente a clases, como parte de la nueva rutina familiar.

El caso de Viviana es especialmente significativo y marca el fin de un ciclo para ella y para muchos de los damnificados por el incendio de Valparaíso, pues fue su grupo familiar el que recibió proveniente de Dichato, de parte de los damnificados por el tsunami tras el terremoto de 2010, una bandera que simbolizó el apoyo y esperanza de sus pares en el sur, quienes viajaron especialmente a Valparaíso para auxiliarla a ella y otras familias dañadas por el siniestro.

Ahora que la situación de emergencia se ha trasladado hacia el norte del país, Viviana enviará su bandera a los damnificados de la zona norte, “yo la voy a enviar ahora con toda la fe con la que llegó a mis manos y la esperanza, porque hoy en día a mí me están haciendo entrega de mi casa y lo que más hay que tener en estos momentos es fe, harta fe”.

Con una mirada en retrospectiva de todo el proceso Viviana agregó que “a veces resulta ser que todo es para mejor, yo así lo tomé, Dios por algo hace las cosas, me quitó mi casa, me quitó todo, nosotros quedamos con lo puesto, pero gracias a Dios hoy me levanté y ahora tengo de nuevo mi casa”.

Cabe destacar que tras la visita, los flamantes nuevos propietarios coordinarán individualmente la entrega y recepción de sus departamentos, para concluir con la solución habitacional transitoria que se dispuso para cada uno de ellos, que consistía en muchos casos en el otorgamiento de un subsidio mensual para arrendar viviendas hasta por $200.000 o la utilización de viviendas de emergencia en caso de contar con terrenos disponibles, beneficios a los cuales también se sumaron el otorgamiento de un millón de pesos en dinero para reponer sus pérdidas materiales y personales, junto a tarjetas de $200.000 para adquirir vestimenta, entre otras ayudas.