Medios estadounidenses dieron a conocer el arresto de un hombre de 58 años, quien planeaba un tiroteo masivo en medio de un concierto de Bad Bunny en Atlanta, Giorgia.

Según detallaron, Mark Adams Prieto, no ocultaba sus intenciones, de por medio del tiroteo masivo, “incitar a una guerra racial en Estados Unidos”.

Su deseo era tan grande, que incluso compartió sus planes con un agente encubierto del FBI.

El sujeto, de 58 años, quería atacar específicamente a “negros, judíos o musulmanes”.

Adams Prieto, fue acusado el pasado martes frente a un jurado de Arizona. Durante la acusación, se detalló que entre enero y mayo de este año, mantuvo conversaciones con un agente encubierto y un informante de la FBI, explicando su idea de tiroteo masivo “contra afroamericanos y otras minorías con el fin de incitar a una guerra racial antes de las elecciones presidenciales de 2024”.

Su plan era llevar a cabo la balacera antes de las elecciones de noviembre próximo.

El tiroteo iba a realizarse durante el concierto de Bad Bunny en Atlanta, el pasado 14 y 15 de mayo pasado, como parte de su exitosa gira “Most Wanted Tour”.

El porqué de haber elegido este concierto es porque, habría una gran concentración de afroamericanos, alegando que actualmente el estado de Giorgia está con mucha inseguridad debido a los afroamericanos.

“Tenemos que acorralarlos. Y puede que algunos intenten salir por una esquina, y a esos hay que machacarlos. Una vez que se hacen a la idea de que están atrapados, se desata el pandemónium. Ahora están en pánico. Y no pueden salir. Ahora van a arrastrarse unos sobre otros para salir”, aseguró el hombre al informante del FBI.

Reveló además que utilizaría durante el ataque dos rifles semiautomáticos, un rifle de francotirador de cerrojo y granadas de humo “para causar más pánico”.

Tras varios meses de investigación, Mark Adams Prieto fue detenido el 14 de mayo pasado en Nuevo México.

Si bien admitió haber tenido planes de realizar el tiroteo masivo con el que “comenzaría la revolución”, aseguró que había desistido de realizarlo.

No obstante, durante su arresto fueron confiscadas siete armas de fuego, además de otras armas en su residencia de Arizona.
Adams Prieto podría ser condenado a una pena máxima de 15 años de prisión, a una multa de 250.000 dólares o a ambas cosas.