Hace algunos días, la Superintendencia de Servicios Sanitarios sancionó a la Empresa Esval con una multa de 100 Unidades Tributarias anuales por haber faltado a su obligación de garantizar la calidad y continuidad del servicio de distribución de agua potable en el mes de julio del 2013, producto de la rotura de la gran alimentadora de Valparaíso. Además de 900 Unidades Tributarias anuales por haber puesto en peligro la salud de la población y afectar a la generalidad de los usuarios.

A raíz de ello, el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro en Sesión Ordinaria del Concejo Municipal, pidió el acuerdo de los concejales para solicitar al Ministerio de Hacienda que los recursos que cancelará Esval por la sanción de la Superintendencia, sean invertidos en proyectos de mejora para Valparaíso.

Según lo sostenido por el edil porteño “hoy estamos solicitando al Ministerio de Hacienda que los dineros de la multa no queden en el Fisco de Chile, sino más bien en la comuna que sufrió el colapso. Tenemos claro que en la ciudad hay muchas cosas que no hemos podido atender, entre ellas sabemos que el Comandante del Cuerpo de Bomberos de Valparaíso, tiene un plan de doble grifo que nos ayudará a atender las emergencias de mejor manera, pero no contamos con los recursos necesarios para desarrollarla, siendo una necesidad imperiosa, al igual que la habilitación de más piscinas para el acopio de buena cantidad de agua. Si tenemos una suma de recursos por multas se puedan invertir y darle un uso para el bien de la ciudadanía”.