El sacerdote de los Legionarios de Cristo, John O’Reilly, tendrá 72 horas a partir de hoy para abandonar Chile, luego de que cumpla la condena por abuso sexual de una alumna del colegio Cumbres, la que cumplió bajo libertad vigilada a partir de 2014.

A O’Reilly además se le quitó la nacionalidad por gracia y fue expulsado del país, motivo por el cual debe irse de Chile tras cumplir la condena.

El sacerdote, de origen irlandés vive en Chile desde 1985, y en 2008 recibió de parte del Congreso y con votos transversales de miembros de las entonces coaliciones políticas Concertación y Alianza, la nacionalidad chilena por gracia debido a su «labor apóstólica y educativa dirigida al mundo de la juventud, inculcando el amor al prójimo y a los más necesitados».

Sin embargo, en 2014, fue condenado por abusos sexuales contra una menor del colegio Cumbres donde ejercía como capellán, y pese a que había otras denuncias, esa fue la única que pudo acreditarse.

Tras esto, el propio Congreso decidió revocar la nacionalidad del cura en marzo de 2015, donde se recomendó pedir la expulsión, la que finalmente fue aprobada, motivo por el cual O’Reilly tiene a partir de hoy, 72 horas para dejar el país. Hace algunas semanas la periodista Andrea Vial comentó en Mesa Central de Tele13 Radio que el cura de origen irlandés le pidió expresamente a sus abogados que llegado el momento analicen las posibilidades de pedir que se revoque la expulsión, ya que no quiere irse del país.

Junto con este escenario, que según explicó Vial es complejo, ya que se deben analizar varios aspectos legales y la forma en que está redactado el decreto de expulsión, entre otros, podría presentarse otro problema mayor para él: la sentencia canónica que debería ser entregada por el Vaticano y en la que habrían más denuncias de abusos.

La investigación canónica se retomó recién en 2013 y según la periodista fue llevada de manera muy lenta por la Iglesia en Chile, sin embargo, ésta acumularía denuncias de personas que no se atrevieron a ir a la justicia cuando se condenó al sacerdote por abusos sexuales y cambiaría el escenario del futuro de O’Reilly y la eventual apelación a la expulsión de Chile si aparece antes o después del cumplimiento de la condena que actualmente cumple.

John O’Reilly vive actualmente en la casa de los Legionarios de Cristo en Los Dominicos y es visitado frecuentemente.