El jefe del Ministerio Público aseguró que no ha cometido irregularidades en su actuar, señalando que las reuniones que sostuvo con el entonces senador Hernán Larraín, para analizar la situación de Iván Moreira en el caso Penta, se dio bajo la Ley de Lobby.

Al respecto, Abbott señaló que «es política de este fiscal recibir a las autoridades y al público que pide audiencia. Dentro de ese contexto, recibí al senador Hernán Larraín, como también he recibido a tres de los parlamentarios que firman la solicitud de remoción».

Además, planteó que en la cita con el hoy ministro de Justicia, “no tenía atribuciones para pedir diligencia alguna (en la causa de Moreira), puesto que la norma establece que el fiscal nacional se encuentra vedado para dar instrucciones particulares”.

De igual forma, el fiscal nacional planteó que habría remitido un oficio al fiscal regional Manuel Guerra, a cargo de la investigación del caso Penta, en la que le hizo presente la postura de Larraín.

Por último, el mandamás del Ministerio Público aseguró que ha “recibido a más de 60 parlamentarios y a más de 300 personas que han manifestado interés de reunirse con este fiscal nacional. Todas han quedado en las agendas por Ley del Lobby”.