Este miércoles, el Juzgado de Garantía de Rancagua ordenó la prisión preventiva de los 18 imputados por el robo a una sucursal de la empresa Brinks en Rancagua, ocurrido el pasado 16 de agosto.

Al respecto, durante la instancia la jueza Jessica Bascuñan, afirmó que esta medida es “proporcional y justificada”, considerando la gravedad de los hechos y la peligrosidad de los imputados.

A los acusados se les imputan delitos de asociación criminal, robo con intimidación, siete cargos por incendio, infracción a la ley de armas, porte de acelerante, y 19 delitos por receptación de vehículos motorizados.  Cabe destacar que 12 de los 18 imputados ya contaban con antecedentes policiales.

En la audiencia se detalló que el robo que tuvo lugar el pasado 16 de agosto al mediodía, involucró la colaboración interna de una cajera y un guardia de la empresa, quienes aparentemente se coordinaron con la banda para facilitar la entrada de los delincuentes y la sustracción de $12 mil millones.

Durante el atraco, los delincuentes utilizaron 14 vehículos, todos robados, de los cuales siete fueron quemados para evitar su identificación.

Finalmente, el tribunal ha dado un plazo de ocho meses para la investigación, durante los cuales los imputados permanecerán en prisión preventiva.