Medidas inmediatas y urgentes adoptará el municipio de Viña del Mar, ante las consecuencias que ha tenido en el normal desarrollo del transporte público el apedreo de microbuses en el sector de Reñaca Alto, llevando a la suspensión del servicio debido a la inseguridad para pasajeros y conductores.

La alcaldesa Macarena Ripamonti afirmó que “toda persona viñamarina sabe que el transporte, hace muchas décadas, es un gran dolor de cabeza para todos nosotros que significa una afectación grave en la calidad de vida, y si a esto se suma inseguridad, apedreos y, por consecuencia, la paralización de servicios, esto es de lo más grave que nos puede estar pasando”.

La autoridad comunal informó que “tomamos contacto ayer (sábado) temprano con la dirigencia y con la familia, a la que conozco hace un tiempo” y que en vista de los antecedentes iniciará diversas acciones: “Vamos a tener una reunión con el ministro de Transporte y con Carabineros a nivel comunal y regional”, puntualizó.

Asimismo, la autoridad comunal anunció que “como municipio vamos a iniciar acciones legales respaldando a las familias porque esto no puede seguir escalando. Si esto ocurre, la afectación es demasiado grande, la gente no puede trabajar, no puede estudiar y no puede llegar a sus casas y eso, hoy día algo que ya está afectado no puede agravarse, no podemos permitirlo vamos a ser muy severos como municipio”, subrayó.