Este domingo, Javier Milei juró como Presidente de la Argentina ante el Congreso de la Nación.

Tras su embestidura, se dirigió a las escalinatas de la casa legislativa para dirigirse a miles de ciudadanos, quienes portando banderas argentinas, amarillas e incluso de Israel, con vítores de libertad, celebraban a su nuevo Presidente de la República.

Durante su primer discurso, que se extendió por algo más de 30 minutos, Milei  se refirió a la situación política, social y económica que enfrenta a partir de hoy.

“Comienza una nueva era de libertad y progreso”, expresó Milei, en medio de los aplausos de los presentes.

“No venimos a perseguir a nadie. Recibiremos con brazos abiertos a todos aquellos dirigentes políticos, sindicales y empresariales que quieran sumarse a la nueva argentina. Pero no toleraremos a quienes usen la violencia o la extorsión para obstaculizar el cambio”, exclamó el mandatario.

“Los argentinos eligieron un Nuevo Contrato Social Liberal. Cuyas instituciones fundamentales son: la propiedad privada, los mercados libres de intervención estatal, la libre competencia, la división del trabajo y la cooperación social”, afirmó Milei.

“El nivel de deterioro de nuestro país es tal que abarca todas las esferas de la vida en comunidad. No sólo en lo económico, también en materia de seguridad, salud, educación e infraestructura”, indicó el mandatario.

El sistema de salud se encuentra completamente colapsado. Los hospitales están destruidos. Los médicos cobran miseria. Y los argentinos no tienen acceso a salud básica”, afirmó el nuevo Presidente argentino.

“El principio será duro. Sabemos que de corto plazo la situación empeorará, pero luego veremos los frutos de nuestro esfuerzo”, dando a entender el ajuste económico que se viene para el país.

“Si mis medidas tienen éxito, será el último mal trago que soportará la sociedad antes de comenzar la reconstrucción de la Argentina. Habrá luz al final del camino”, cerró el Presidente Javier Milei.