Un brutal crimen se vivió el año 2020 en Estados Unidos, luego que una estudiante de 20 años tomó una desesperada decisión para evitar que su madre supiera que fue expulsada de la universidad: le quitó la vida golpeándole en la cabeza y propinándole cerca de 30 puñaladas.

El crimen ocurrió en el condado de Summit Estado de Ohio, donde tres años después del crimen, la joven fue encontrada culpable durante el juicio en su contra por los delitos de asesinato, agresión criminal y manipulación de pruebas.

Sidney Powell, quien al momento del crimen tenía 20 años de edad “golpeó a Brenda Powell en la cabeza con un sartén de fierro y luego la apuñaló casi 30 veces en el cuello”, se dio a conocer en el juicio.

El abogado de la joven asegura que su cliente sufre de esquizofrenia, lo que fue desmentido por una profesional clínica ante el jurado del tribunal: «La mejor fuente de información para una evaluación es lo que se dijo y sintió en el momento del incidente. Simplemente, no cuadraba con la esquizofrenia», señaló la doctora Silvia O’Bradovich.

Sidney conocerá su sentencia el próximo sábado 28 de octubre, cuando el jurado de Summit decrete el tiempo que permanecerá privada de libertad.