Esta tarde el presidente Gabriel Boric entregó en  La Moneda su primer discurso a la nación tras asumir en el cargo, el cual estuvo marcado por entregar los lineamientos de lo que será su administración que comienza hoy.

Con una plaza de la Constitución llena, el exdiputado comenzó señalando: “Chilenas y chilenos, habitantes de nuestra patria, pueblo de Chile, esta tarde por primera vez les hablo como Presidente de la República. Presidente de todas y todos los que habitamos este país, que tanto queremos a Chile, que ha sufrido tanto y que también nos ha dado tantas alegrías….Gracias infinitas por darme este honor”.

“Este Chile, hecho de diversos pueblos y naciones, instalado en una cornisa del continente, entre las cordilleras imponentes y su océano mágico, entre el desierto de vida y los hielos antárticos, enriquecido y transformado por el trabajo de su pueblo, es este Chile que solo en un puñado de años y ustedes lo han vivido, ha debido atravesar terremotos, catástrofes, crisis, convulsiones y una pandemia mundial, y violaciones a los Derechos Humanos que nunca más se repetirán en nuestro país, pero en el que siempre nos sacudimos el polvo, nos secamos las lágrimas, ensayamos juntos una sonrisa, nos arremangamos y seguimos. Chilenas y chilenos, siempre seguimos”, afirmó.

De esta misma forma, el mandatario destacó el rol de la ciudadanía indicando que esta es “parte protagónica de este proceso, el pueblo de Chile es protagónico en este proceso. No estaríamos aquí sin las movilizaciones de ustedes”, aseguró. “Y quiero que sepan que no llegamos aquí solo para llenar cargos y solazarnos entre nosotros, para generar distancias inalcanzables. Llegamos aquí para entregarnos en cuerpo y alma al compromiso de hacer mejor la vida de nuestra Patria”.

Posteriormente, el Mandatario afirmó que “hoy iniciamos un período de grandes desafíos, de inmensa responsabilidad, pero partimos de cero. Chile tiene una larga historia y hoy día, este día, nos inserta en esa historia larga de nuestra República”.

“Iniciar mi mandato como Presidente Constitucional de la República de Chile es hacerme parte, hacernos parte de una historia que nos excede a todos, pero que al mismo tiempo, le da forma, le da sentido y dirección a nuestra mirada”, enfatizó.

En esta misma línea, el jefe de Estado dijo que “tenemos que abrazarnos como sociedad, volver a querernos, volver sonreír. Más allá de discursos, qué importante, qué diferente es cuando en un pueblo nos queremos, nos cuidamos entre nosotros, no desconfiamos el uno del otro, sino que nos apoyamos (…) eso es lo que tenemos que construir, compatriotas…tenemos que trabajar juntos con nuestros pueblos hermanos, nunca más mirarnos con desconfianza, trabajemos juntos en América Latina para salir adelante juntos”.

“Caminemos juntos la ruta de la esperanza y construyamos todos el camino hacia un país que sea digno y justo… dignidad, qué palabra tan linda”, declaró.

Trabajo del Gobierno 

Luego, Boric aseveró que la nueva administración quiere realizar un cambio radical en la forma en la cual se relaciona la ciudadanía con el Estado, indicando que “queremos cambiar la relación que hay con las autoridades, no pueden ser inalcanzables, queremos ministros en terreno, en la calle, estando con el pueblo, queremos no hacer visitas a las regiones que sean de un par de horas para inaugurar una obra. Escuchar, no estar escondido”.

Así, llamó a la ciudadanía a que «trabajemos juntos, que seamos ciudadanos y que este sea el Gobierno del pueblo y ustedes lo sientan como su Gobierno, de todas y todos los chilenos y chilenas, y para eso nos vamos a necesitar todos, gobiernos y oposición, instituciones y sociedad civil”.

Finalmente, el Presidente agregó “en cuatro años más el pueblo de Chile nos juzgará por nuestras obras y no por nuestras palabras. Hoy era necesario hablar, mañana, todos juntos a trabajar”.

“Como pronosticara hace casi 50 años Salvador Allende, estamos de nuevo, compatriotas, abriendo las grandes alamedas por donde pase el hombre y la mujer libre, para construir una sociedad mejor. Seguimos”, cerró.