El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se autoproclamó ganador de las elecciones presidenciales, esto a pesar de que aún ninguno de los dos principales contendores ha llegado a los 270 votos electorales necesarios para declarar una victoria.

Esta situación se estaría sumando a que tampoco existe un claro resultado en varios estados decisivos como Michigan, Wisconsin o Pensilvania, donde el triunfo en estos podría inclinar la balanza para cualquiera de los dos contendientes.

En este contexto, Trump lanzó un inquietante discurso desde Washington, en donde afirmó que el Partido Demócrata estaría ejecutando el “robo de las elecciones”, situación por la cual ya ha amenazado con recurrir a la Corte Suprema para que detenga el recuento de los votos remitidos por correo después de meses poniendo en duda un método de votación que él mismo utiliza.

“Es un fraude para el público americano, una vergüenza para el país. Estábamos preparándonos para ganar estas elecciones y, francamente, las hemos ganado”, declaró.

En este sentido, el mandatario agregó: “Nuestro objetivo es garantizar la integridad de nuestra nación e iremos al Tribunal Supremo. Queremos que se detengan todos los votos, no queremos encontrar papeletas a las 4 de la mañana”.

Finalmente, el republicano cerró diciendo : “Sabían que no podían ganar […] Millones de personas han votado por nosotros y un grupo muy triste de gente está intentando arrebatarles su derecho al voto y no lo toleraremos”.

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