Rodrigo Caramori, presidente del Partido Regionalista Independiente (PRI), fue ratificado por la colectividad para que continúe en el cargo por el período 2020-2022.

Esto después del proceso electoral interno que terminó este sábado, donde la lista que encabezaba el dirigente no tuvo rivales, por lo que el Tribunal Supremo, máximo órgano disciplinario de la entidad, determinó su victoria junto a la directiva nacional en ejercicio.

Cabe recordar que Caramori asumió la jefatura del PRI en diciembre de 2019, cuando el entonces presidente Hugo Ortiz De Filippi fue designado como Seremi del Trabajo y Previsión Social en la Región de Los Ríos y tuvo que dejar la testera, motivo por el cual Caramori, en ese momento secretario general, tomó la posta dejada por el abogado y exsenador.

Tras conocerse la noticia, Caramori declaró que “el objetivo es mantener y potenciar el gran trabajo realizado en todas las estructuras internas, pero pensando en los inmensos desafíos electorales que tenemos por delante, como son las elecciones municipales y de gobernadores regionales, en abril de 2021, y las parlamentarias, presidenciales y cores, en noviembre del mismo año”.

Entre las próximas líneas de acción, comentó el líder regionalismo, se cuenta “potenciar el trabajo de búsqueda de candidatos para los comicios municipales, continuar con las labores de la Academia PRI en cuanto a formación y capacitación de dirigentes y postulantes a cargos de elección popular, hacer crecer el PRI Mujeres, PRI Jóvenes y el PRI Migrantes como departamentos y dotar de más insumos al centro de estudios y pensamiento Proposición”.

Respecto a lo político, “debemos avanzar en el fortalecimiento de Chile Vamos tras el ‘nuevo trato’ que anunció el Gobierno, para lo cual hemos entregado propuestas y documentos a los demás presidentes de los partidos y a los ministros del Comité Político, además, buscar entendimientos con otros referentes del centro político de cara a la campaña de 2021 y, lo más importante, llegar al proceso de primarias presidenciales con un abanderado propio que represente el ideario del centro político, el regionalismo, la clase media y el diálogo constitucional sin vetos y sin exclusiones”, enfatizó Caramori.

Por lo tanto, concluyó, “el verdadero trabajo empieza la mañana siguiente del 25 de octubre, sea con el Apruebo y la futura elección de los constituyentes que trabajarán en la redacción de la nueva Carta Magna, y donde el PRI presentará candidatos en la mayor cantidad de regiones posible, o con el Rechazo, que dará lugar a importantes reformas a la Constitución de 1980”.

Es importante destacar que el PRI fue el primer partido de Chile Vamos que se manifestó a favor de seguir adelante con el proceso constitucional. De hecho, el 98,5% de la Comisión Política votó en enero por apoyar el Apruebo y por la elección del órgano constituyente 100% ciudadano y, luego, en marzo, el Consejo General refrendó con el 92% lo determinado antes, otorgando, de paso, “libertad de acción” para todos los militantes.