Proyecto financiado por el Fondo de Fomento de Medios de Comunicación Social del Gobierno de Chile y del Consejo Regional de Valparaíso

Me llamo Karina Chávez y soy periodista. Llegué a trabajar a la Radio Punto 7 de Valparaíso, fui parte de las mañanas en ese medio. En 2012 entré a radio Bío-Bío y ya por el 2013 o 2014, no recuerdo bien, entré al matinal de la misma emisora, donde actualmente comparto micrófono con Rodolfo Hahn y juntos damos noticias y estamos al servicio de la comunidad.

Paralelamente, estoy ligada a la música, ya que hago gestión de prensa a varios artistas nacionales, entre ellos Natalino, Tomo como Rey y Sinergia; además, en agosto próximo, lanzaré mi primer sencillo como cantante con mi proyecto Kay Música.

Y se vino el Covid-19

El verano pasado fue intenso para mí, porque con la radio me tocó participar en la ruta de los festivales que se realiza en distintas partes del país y paralelamente tuve que cumplir con la programación habitual de Bío-Bío. Tuvimos que estar en la mañana y también los fines de semana, entonces no habíamos parado.

Alrededor del 3 de marzo empieza a circular la información de la primera persona contagiada, nosotros estábamos terminando este periodo estival agotador y la verdad es que fue muy impresionante ser testigo de cómo el virus fue provocando una incertidumbre, una inquietud entre las personas.

Han sido meses bastante complejos yo creo que para todos, pero comunicacionalmente también creo que ha sido muy poderoso, en el aspecto de poder entregar herramientas, poder ayudar, ser comunidad y un canal también como siempre ha querido ser el servicio de la radio.

Las comunicaciones me mueven mucho, intentaré estar en ellas hasta donde pueda, pero creo que si salgo, estaría en el lado de las artes… todo comunica. Soy una afortunada por hacer lo que me gusta. 

No sé si me imagino en otro lado, no lo digo puntualmente sobre un trabajo en específico, sino que en el rol de comunicar, de poder darle una alegría a las personas, porque en estos tiempos tan complejos se hace muy difícil levantarse el ánimo. Muchas personas viven solas, creo que eso también juega un despertar muy importante para mí, el tema de acompañar a la gente, de subirle un poco el ánimo, de entregarle una energía que se sienta un poquito más vital al día siguiente, Yo creo que eso es lo que te mueve también a seguir comunicando, a seguir trabajando en esto.

Llevamos más de 100 días de hablar de un virus y de lamentar fallecidos, este tema te cansa emocionalmente, porque uno no se puede quedar indolente frente a lo que está viviendo la gente. Obviamente esto influye en ti y te emocionas cuando ves las imágenes de cómo los trabajadores de la salud están trabajando en medio de esto, cómo le toman las manos a las personas que están en la UCI, porque no tienen a sus familiares cerca, te duele… 

La pandemia en positivo

Las historias de los auditores y sus experiencias son muchas y te marcan, por ejemplo, las ollas comunes que hoy en día se están haciendo en distintos puntos para poder ayudar a otras personas; o sea, ni siquiera son tu familia y te están dando una mano, te están dando un plato de comida, creo que eso es sin duda algo maravilloso. 

Me ha llamado mucho la atención en medio de esta pandemia la colaboración, eso de volver mirar al vecino de enfrente. Ocupan la tecnología, hacen grupos de WhatsApp entre ellos para saber quién ayuda, quién está vendiendo esto, quién necesita algo… Creo que eso ha sido súper positivo.

Los auditores ayudan, es muy bonita esa parte que estamos viviendo. Sé que ha sido doloroso para muchos, hay gente que ha perdido familiares con esto de la pandemia, pero también está esta otra pata que es la solidaridad que ha existido entre las personas. Creo que eso hay que sumarlo, hay que complementarlo, hay que potenciarlo y que no se pierda, ese poder de fraternidad que ha crecido entre la comunidad.

Otro punto que podría ser algo positivo de todo lo que estamos viviendo es, sin duda, el parar un rato. Estar en tu casa. Creo que la gente ha despertado, en este sentido, se puede evaluar también qué es lo que significa cada una de las personas que están a su alrededor.

Mucha gente ha tenido que estar lejos de sus familias, de sus padres, de sus abuelos, de sus tíos, de sus hermanos. Creo que una de las cosas buenas es sentir cuánto se extrañan y se valoran las personas cercanas.

Otro punto positivo creo que ha sido, sin duda, el trabajo y el rol que tiene cada una de las funciones en el desempeño para que la gente pueda seguir haciendo su vida. Hablamos del rol de la salud, del abastecimiento… esas personas han sido super importantes en este proceso, porque han seguido trabajando, han sido luchadoras y, definitivamente, uno se saca el sombrero ante ellas.

Otra de las cosas que me llama mucho la atención es la cantidad de cosas ricas que se preparan en casa, cómo mucha gente se ha volcado a cocinar, a salir de la rutina de comprar las cosas preparadas y hacerlas uno mismo. Creo que hay muchos que se han descubierto en la casa y han nacido muy buenos chefs en este último tiempo. Hay una infinidad de cosas buenas que ha dejado la pandemia, saliendo de todo lo negativo que conlleva.

Ser periodista hoy en día

No es fácil, porque a todos nos afecta o a todos nos podría afectar, independiente del punto de vista, podemos tener problemas de salud, económicos, este mismo distanciamiento físico es muy complejo. 

Como persona, uno puede descubrir nuevas herramientas también en medio de lo que está pasando y de este encierro. Creo que para las personas que tienen la posibilidad de estar en su casa y que no salen es una oportunidad muy buena para poder realizar otro tipo de actividades.

En mi caso ha sido muy difícil tratar de separar el servicio, el trabajo de mi vida cotidiana. Creo que dentro de casa uno debe mantener cierto tipo de horarios, de hábitos que no alteren mucho tu funcionamiento, porque después tenemos que volver a la normalidad, o a esta nueva normalidad que le vamos a llamar.

La radio es un servicio, no hay que olvidarlo nunca; cumple un papel fundamental en cuanto a las cadenas de favores especialmente en los tiempos que corren. Nosotros somos una radio y, específicamente, la mañana es muy potente. Están pasando muchas cosas, tienes muchas noticias, pero como premisa siempre se nos ha inculcado en la radio que nunca hay que olvidar el servicio a las personas. Son las personas las que nos escuchan, las que necesitan comunicarse con nosotros, creo que eso es muy importante, no hay que olvidarlo nunca. Sobre todas las cosas, la radio cumple un rol de servicio y creo que eso también es lo que me ha movido a trabajar en Bío-Bío. 

Creo que la parte más importante hoy día, es lograr detenerse un poco. Sin duda, como comunicadores estamos en un constante ir y venir, por la misma pasión que tenemos y por lo que hacemos, nos cuesta detenernos y siento que echo de menos muchas cosas. 

Tengo la posibilidad de trabajar con artistas en la música, haciendo gestión de prensa, eso también te nutre y lo extraño. Tengo la fortuna de conocer músicos maravillosos que son grandes amigos hoy en día y también he visto cómo la constancia y la perseverancia siempre dan sus frutos. 

Creo que después de la pandemia echaré de menos el desconectarse un poco. Cuesta mucho hoy día, estamos todos conectados, todos pendientes de lo que va a pasar, toda la información. Uno constantemente está conectado, es inevitable por el trabajo que hacemos, pero creo que también hay que buscar esas salidas de desconexión, de silencio. Hay muchas personas a las que no les gusta el silencio, a mí en particular me encanta, creo que por ahí va esa mano, esa mano de tener espacios para ti, que en el habitual, en el día a día poco lo haces, poco te detienes, creo que eso hoy día me deja esta pandemia y creo que lo voy a tomar en serio.

El estudio en casa

No ha sido muy difícil para mí. Soy una persona muy apegada a la escritura, a pintar y sobre todo a componer; compongo música, eso ha sido uno de los grandes escapes para poder concentrar también esta otra área, el área un poco más íntima, salir un poco del trabajo dentro de tus mismas cuatro paredes y poder realizar otro tipo de cosas. 

Es muy difícil desconectarse cuando también tienes el trabajo dentro de casa, pero para mí la música, en este caso, ha sido el gran puente para poder sostener la parte emocional, esa parte donde también pueda fluir la otra escritura, no la escritura tan consciente de estar captando tanta información, sino que la de crear, creo que esa es la que me ha alimentado y me ha dado en cierta forma esa tranquilidad que cuesta obviamente en estos días.

Hay mucha inquietud respecto de lo que va a suceder con la música, pero la industria en general viene cambiando hace mucho tiempo. Las plataformas digitales vienen a complementar de manera importante a cada uno de los artistas, hoy día dan cuenta de lo que ha estado pasando estos últimos años con los autores e intérpretes musicales.

Hoy día, en medio de la pandemia, la única inquietud que queda y que todavía se está descubriendo es la forma en que estás entregando tu trabajo, y no hablo de la producción discográfica ni de lo que se presenta finalmente, sino que los temas de las presentaciones y conciertos. 

Hemos estado viendo cómo los artistas se han tenido que ir reinventando en el contexto actual, ofrecen sus obras de manera de que la gente pueda comprar un ticket y logre ver en el teléfono, en la computadora, en la pantalla de televisión el show adquirido

Es un tema que ha ido evolucionando, pero también estamos en un proceso de ajuste, porque si bien hoy día internet y las plataformas digitales son importantísimas para los artistas, no sabemos qué va a pasar más adelante cuando vuelvan los conciertos en vivo.

Mi música

Compongo hace mucho tiempo, soy autodidacta y por lo mismo he tenido procesos durante años: tratar de autoconvencerme de que hago música, es muy extraño decirlo, pero es así. 

Tengo mucho cariño y respeto a la categoría de músico, porque he tenido la oportunidad de conocer a varios, entonces uno dice bueno, ¿qué es lo que hago? Yo llevo componiendo desde los 14 años, pero en enseñanza media junto con una compañera, comencé a pensar en que mis escrituras podían tener música y ahí empezó mi cariño por hacer canciones. 

Me di una vuelta super larga, me costó un poco reconocer que podía crear música para mostrar a la gente, para hacerle sentir que hay personas que viven lo mismo que ellas y que también todo se supera. Mis canciones son románticas, no tienen otro fin, son super conscientes, son super naturales, espontáneas.

Estudié periodismo y lo primero que entra a mi vida es la radio, que está completamente ligada a la música, jamás me pude sacar la música de mi vida y creo que esto hoy día es una consecuencia de la pandemia. Ese impulso me lo dio la creatividad y creo que por eso vamos a llegar a esa instancia y el 21 de agosto vamos a estar lanzando una canción.

Proyecto financiado por el Fondo de Fomento de Medios de Comunicación Social del Gobierno de Chile y del Consejo Regional de Valparaíso

📻 Karina Chávez la voz de la mañana en Radio Bío-Bío nos cuenta su experiencia en esta cuarentena por la Pandemia del Coronavirus.
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Publicado por Diario El Epicentro en Martes, 21 de julio de 2020