El aumento de las lluvias e inundaciones en parte importante del país, producto de sucesivos frentes de mal tiempo, está produciendo que muchas familias deban abandonar sus hogares y resguardarse en otras viviendas, produciendo hacinamiento y con ello riesgo de contagios de Infecciones Respiratorias Agudas (IRA), pero sobre todo, en medio de la pandemia, de COVID-19.

Así lo advirtió la presidenta de la Sociedad de Enfermedades Respiratorios (SER Chile), Dra. Laura Mendoza, quien señaló que “estas lluvias, con algunas inundaciones y mucha humedad, y con el frío que viene a continuación, son factores que pueden influenciar en un mayor riesgo enfermedades respiratorias agudas, ya sean IRA o también descompensaciones de pacientes con enfermedades respiratorias crónicas”.

“Por ejemplo, pacientes con asma o con enfermedades pulmonares obstructivas crónicas (EPOC), o incluso con insuficiencia cardiaca u otras condiciones, pueden descompensarse por presentar infecciones respiratorias agudas”, explicó la especialista.

En este sentido, advirtió que la exposición a la intemperie o el hacinamiento son factores detonantes de estas infecciones. “Por ejemplo, las familias que han sufrido inundaciones en sus casas y que han debido trasladarse a otra vivienda, corren más probabilidades de hacinamiento, y eso implica, obviamente, mayor riesgo de IRA, pero también de COVID, que es prácticamente el único virus circulante”, recalcó.

La presidenta de SER Chile advirtió que también “la calefacción en los domicilios puede contribuir a la contaminación ambiental, como es el caso la calefacción a leña, y ese es un factor que también contribuye a empeorar las dolencias respiratorias y la posibilidad de IRA. No se trata de tener un buen sistema con tiraje, que evitará la contaminación intradomiciliaria, sino que de ser solidario, porque el uso de leña contamina la ciudad”.

“Al contrario, hay familias que obviamente no tienen recursos para un buen sistema de calefacción, y que utilizan leña o carbón para calefaccionar sus casas, y eso genera contaminación intradomiciliaria. Ese tipo de calefacción pueden ser gatillantes para cuadros agudos”, sostuvo la Dra. Mendoza.

Por lo anterior, dijo que “debemos evitar en la medida de lo posible estos hacinamientos, siempre y cuando sea posible hacerlo. En caso contrario, tomar todas las medidas posibles para evitar contagio, extremando los cuidados y cumpliendo confinamiento. También es recomendable ventilar las viviendas. En caso de albergues, las autoridades deben velar por la higiene del recinto, procurar el distanciamiento social de quienes lo utilicen y fomentar el permanente lavado de manos. Estas son medidas que contribuyen a evitar contagios de COVID”.

“Por último, debemos recordar un factor adicional con el tabaquismo. La persona que fuma, en estas temperaturas frías, también corre riesgo de contraer alguna IRA, y si consume tabaco dentro del hogar, termina perjudicando a su familia, pues se convierten en fumadores pasivos. Tenemos que recordar también que quienes fuman son también potenciales pacientes de COVID, por la acción de llevarse la mano al rostro, principal vía de contagio, a lo que se suma cuadros respiratorios más complejos si los fumadores llegan a contraer el coronavirus”, concluyó la Dra. Laura Mendoza.