Eran más de 300 bazares y locales que no habían podido ingresar al último comodato entregado para la feria Caupolicán de Viña del Mar, lo que mantenía la preocupación de los comerciantes.

Sin embargo, la Seremi de Bienes Nacionales dio a conocer un permiso provisorio, el cual fue entregado a la Municipalidad, la cual estará encargada de administrar dichos cupos y permitirá que los trabajadores puedan desempeñar sus labores con normalidad.

Este comodato especial fue valorado por el consejero regional (core), Manuel Millones, quien apuntó a la tranquilidad que se brinda a los comerciantes con esta medida, tras meses de incertidumbre y trámites.

La autoridad señaló que «mejorar las condiciones de seguridad de la feria es vital, porque en la actualidad hay un alto riesgo, tanto en los momentos que hay público (…) como también en las tardes o noches, principalmente por el tráfico de drogas que ha sido denunciado por los propios dirigentes».

En ese sentido, indicó que «se debe establecer una seguridad permanente del perímetro de la feria, de modo tal que siga siendo un ícono de la ciudad y así poder mejorarlo e intervenirlo de manera integral con buenos accesos, iluminación, seguridad y mejores puestos para los comerciantes».

El consejero finalizó diciendo que lo más importantes es que ahora los comerciantes de los bazares tendrán una certeza jurídica para poder funcionar, a la espera que la Municipalidad de Viña del Mar presente un proyecto final para adjudicarse el comodato definitivo.