La Copa Libertadores tiene una edición para jugadores menores de 20 años, que sirve para promocionar talentos futbolísticos del hoy y el mañana.

En la semifinal de esta edición, River Plate (Uruguay) se disputaba en su cancha el pase a la final frente a Independiente del Valle (Ecuador), siendo el resultado favorable para los visitantes.

Muy al estilo uruguayo, al final del partido ocurrieron disturbios entre los jugadores, luego que los locales increparan a los ecuatorianos por las celebraciones tras el triunfo.

Según comentaron los charrúas, el defensor ecuatoriano, Ángelo Preciado, se burló de los jugadores de River, y estos fueron a buscarlo muy molestos con su actitud.

Preciado comenzó a huir de los uruguayos, que no parecían querer dialogar, y por esa razón, el zaguero tomó el banderín del tiro de esquina y comenzó a amenazar a sus rivales.

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