En medio de cuestionamientos a la transparencia y legitimidad del proceso eleccionario de la CUT, y tras ocho días desde el primer voto, ayer se conocieron los resultados que otorgaron la mayoría a la lista liderada por Arturo Martínez (PS), quien se impuso a la actual presidenta, Bárbara Figueroa (PC).

Según el balance del Colegio Electoral Nacional (CEN) Martínez logró 19 de los 45 consejeros nacionales, con más de 286 mil votos. Le siguió Figueroa, con 16 electos y cerca de 253 mil preferencias, mientras que la lista de Nolberto Díaz (DC) obtuvo 8 consejeros y aproximadamente 66 mil votos.

Los resultaron no dejaron satisfechos a los integrantes de las listas de Díaz y Figueroa. Ésta última pidió repetir la votación en 30 días.

Tras conocerse los resultados, Martínez afirmó que «la verdad es que tengo un dejo de tristeza, porque aquí hay que saber perder y ganar. Cuando yo perdí el 2012 fui antes de que se dieran los cómputos a saludar a la presidenta electa y a proclamarla. Ahora han pasado ocho días, todos los comandos tienen sus cómputos y nadie se ha acercado, están buscando subterfugios para decir que la elección no ha sido correcta».

Por su parte Figueroa sostuvo: «Evaluamos que un cierre cuestionado de las elecciones en curso genera un daño a la imagen de la Central, afectando la legitimidad y capacidad de acción de la futura conducción de la organización».

«Proponemos realizar un nuevo proceso de votación, en un plazo de 30 días, que superando las problemáticas vigentes, y que concluya con un resultado incuestionable del proceso de elección», agregó.

Asimismo, el postulante de la lista C y actual vicepresidente de la Central, Nolberto Díaz, también planteó su intención de impugnar los resultados de las elecciones. Incluso, en conversación con Radio Bío Bío, comparó este resultado con los escrutinios del plebiscito realizado por Augusto Pinochet en 1980.