Con bailes, cantos, misa y una procesión, habitantes de Placilla y Peñuelas se unieron para celebrar al patrono San Cristóbal, el santo de los conductores, guiado por la comunidad de la Parroquia Nuestra Señora de Rosario de Peñuelas.

El programa dio inicio con una procesión de grupos folclóricos y cuequeros, quienes llevaron sus ofrendas al patrono ubicado a las afueras del templo y que solía ser una parada constante para todos los conductores que se dirigían a Santiago. Hoy, la ruta 68 le da un espacio para que aquellos que quieran rezarle puedan hacerlo, por lo que continúa siendo el Santo de los viajeros y choferes.

Fue en esta ocasión que el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, se sumó a las palabras de quienes asisten cada año a la celebración, quienes le agradecen por cuidarlos en los largos caminos.

“San Cristóbal es el santo de los conductores y es también lo que refleja cuando esta era la ruta que unía Santiago con Valparaíso y todos los conductores paraban obligadamente en este sector de la ciudad para tener un mejor conducir y ser acompañados por su santo. Por aquí han pasado muchos conductores que hicieron un alto en el camino y se llevaron las esperanzas a sus destinos. Fue una muy bonita procesión donde participó la comunidad de Peñuelas y donde tenemos la posibilidad de que el santo sea saludado por muchas expresiones y vivir intensamente esta festividad religiosa”, expresó el jefe comunal.

Esta fiesta, que ya se agarró a la tradición de celebrarse el último domingo de julio, descansa en la historia de la Parroquia Nuestra Señora de Rosario de Peñuelas, la cual fue alguna vez la hacienda jesuita de la localidad, y se transformó en el templo que es hoy en 1772.

No fue sino hasta 1940 cuando un viajero, Francisco Villagrán, trajo desde Francia la imagen del Santo Patrono, figura que es venerada en estas fechas con coloridas y entusiastas actividades para toda la comunidad, apoyadas por la Delegación de Placilla de la Municipalidad de Valparaíso.