El diputado del Partido Socialista, Fidel Espinoza, entregó esta mañana carta firmada por 51 parlamentarios del Congreso de Chile, dirigida al Papa Francisco, en la que le solicitan que la nominación de Juan Barros como nuevo obispo de Osorno sea analizada por el Sumo Pontífice.

A las 05.30 horas de la madrugada de este lunes (hora en Chile), 9.30 horas am en Roma, el parlamentario Fidel Espinoza (PS), cumplió el compromiso contraído con la comunidad osornina de entregar ante la Embajada Chilena en el Vaticano, la misiva que busca que el Papa Francisco revierta la nominación de Monseñor Juan Barros como obispo de Osorno.

«Lo dijimos hace 3 semanas y lo hemos cumplido. Nos hemos reunido con la embajadora (s) ante la Santa Sede, señora Patricia Ríos Tapia, y le hemos hecho entrega de la carta, con lo que se garantiza en un 100% que ésta llegará a manos del Sumo Pontífice», sostuvo el legislador.

En la carta firmada por 51 diputados y diputadas del Congreso Nacional, los parlamentarios le señalan al Papa Francisco la enorme preocupación que esta nominación ha provocado en el país, toda vez que Barros aparece acusado de haber encubierto los actos de Karadima, que, como todos saben, ha sido condenado por el Vaticano por sus actos atentatorios contra la propia Iglesia.

«Estamos convencidos que él no tuvo a la mano la suficiente información al momento de nominar a Barros como obispo de Osorno. El Papa condena los actos de abusos sexuales en la Iglesia y en cualquier lugar, por lo que este nombramiento es simplemente insostenible», indicó.

Consultado el parlamentario respecto a los responsables de haber enviado este nombre al Vaticano, no dudó en responsabilizar a quienes hoy dirigen la Iglesia en nuestro país. «Qué duda cabe que Monsenor Ezzati y el Nuncio Apostólico tienen mucho que decir. Ellos presentaron el nombre de Barros, sabiendo que encubría a Karadima. Él era uno de sus cercanos protectores y encubridores», indicó Espinoza respecto a Barros.

Trato de respeto y deferencia

Espinoza indicó que esta mañana la Embajada Chilena ante la Santa Sede «nos ha brindado un trato de respeto y hemos sostenido una conversación sana y franca con la embajadora (s). Esto, por cierto, dista mucho de la forma como fuimos recibido en la Nunciatura en Santiago, cuando fuimos a entregar esta misma carta y mandaron a recibirla a la señora que realiza las labores domesticas en dicha institución, faltándole el respeto a la propia señora y al parlamento chileno».

El diputado expresó que «muchos católicos nos sentimos decepcionados por los hechos que han ocurrido al interior de la Iglesia y que se han revelado públicamente en los últimos años, pero tenemos confianza en que el Papa Francisco revertirá esa mala imagen y con actos sinceros con el mundo católico recobrará esa confianza de la ciudadanía. Con el caso de Barros está la primera opción de demostrarlo», concluyo Espinoza.