El Segundo Juzgado Civil de Valparaíso condenó al Fisco a pagar 110 millones de pesos como indemnización a la madre y tres hermanas de María Angélica Erices, una de las 16 víctimas fatales que dejó el maremoto del 27 de febrero de 2010 en el archipiélago de Juan Fernández.

Según el abogado de la familia, Javier Cortés, la primera ola del tsunami golpeó a la isla Robinson Crusoe 51 minutos después del terremoto 8,8 grados Richter con epicentro en Cobquecura, tiempo suficiente para haber prevenido a la población del archipiélago a su vez el abogado de la familia alegó tambien que el mar se internó 180 metros isla adentro, por lo que en pocos minutos de caminata Erices podría haber abandonado su hogar, ubicado a 90 metros del mar, y salvarse en caso de que se hubiera alertado sobre la situación.

Como defensa, el CDE reclamó que no se dio aviso debido a la “conmoción, caos, destrucción masiva y pérdida de personas, bienes públicos y privados” provocados por el terremoto.