Con la presencia del ex Ministro Jaime Mañalich, Amplitud presentó su Comisión de Salud con el fin de fiscalizar el programa de gobierno en esta materia y enfrentar también los desafíos que se vienen en materia de salud pública nacional.

En este sentido, la diputada Karla Rubilar, quien encabeza esta comisión integrada por 17 ex autoridades de Gobierno, manifestó que: “Nosotros tenemos que definir cuáles van a ser nuestros principales ejes. Pero vamos a estar en la discusión de la reforma de la ley de isapres, en la fiscalización de las promesas del programa de gobierno y en particular de la infraestructura”

Así mismo- continuó- “Tenemos muchísimas dudas y lamentablemente creemos que no se van a cumplir con la construcción de los 20 hospitales”

En la oportunidad, Jaime Mañalich – quien fue invitado a exponer a la comisión y será parte de los asesores externos de Amplitud- aprovechó no sólo de analizar la contingencia en materia de salud, sino que criticar a la actual administración por frenar los proyectos de hospitales concesionados.

El ex ministro aseguró que la idea de concesionar hospitales pertenece al Gobierno de Frei, cuando Lagos era Ministro de Obras Públicas,  y se realizó con el fin de acortar la brecha en infraestructura hospitalaria, y que el gobierno de Piñera no hizo más que seguir el mandato en la construcción de nuevos recintos, donde se dejaron incluso en Contraloría para la toma de razón de los hospitales del Salvador, Félix Bulnes, entre otros.

“A dos meses de asumir el actual gobierno con la complicidad el Ministerio de Obras Públicas estas obras siguieron adelante con su licitación y fueron adjudicadas en mayo del 2014 y publicadas rápidamente por el ministerio de obras públicas en el diario oficial teniendo 6 meses de plazo para hacerlo sólo  se demoraron cinco días” dijo Mañalich.

Sin embargo, según el ex ministro los proyectos se paralizaron por el movimiento gremial.

“El Hospital Sótero del Río para un millón de habitantes- cuyo proyecto fue enviado para que toma de razón a Contraloría- se decidió frenarlo no por razones técnicas, sino por la presión de los gremios para que ese hospital se muriera”.

En este sentido, Mañalich fue crítico, al señalar que no hay 350 millones de dólares en las arcas fiscales para construir el hospital, y que el inicio de las obras por vía sectorial no tiene fecha de inicio.

“En mi opinión  no puede iniciarse antes de seis años, esto en el escenario que la empresa que se ganó la licitación no lo judicialice porque si lo judicializa eso implica una orden de no innovar que implica que el Hospital Sótero del Río no puede construirse mientras los trámites  judiciales estén en discusión, lo que podría tomar 10 años”.

Finalmente, aseguró que: “No es responsable ni respetuoso con la actual presidenta de la república decir que está en contra de los hospitales concesionados (…) porque lo que dijo en su campaña era que no los iba a frenar. Ahora  vemos con enorme preocupación que consorcios internacionales a los que se les quiere llamar para reactivar la economía del país contribuyan en la construcción de carreteras cuando se les está diciendo al mismo tiempo que esta vía de licitación no corre”

“Creo que hay un problema de liderazgo y de desorientación que produce un enorme daño a la ciudadanía (…) La salud de los chilenos no puede esperar, no podemos seguir hasta que se pongan bombas en los hospitales para apurar el tranco de una necesidad”, sentenció.