Hasta la cúpula del Parque O’Higgins llegó la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, para encabezar el Día Internacional de la Prevención del Consumo de Drogas, actividad que año a año busca renovar el compromiso de la sociedad en contra de este flagelo.

La Mandataria destacó los avances que ha realizado Chile en materia de prevención, pero reiteró la necesidad de redoblar los esfuerzos como país para seguir disminuyendo la penetración de este tipo de sustancias ilícitas en la ciudadanía.

“Todos sabemos que cuando estamos hablando de drogas, incluyendo alcohol y drogas, no hay política más eficiente que la prevención (…) lo que estamos haciendo aquí todos nosotros es reafirmando un compromiso con esta tarea, estamos hablando del bienestar de los niños, niñas y jóvenes de Chile”, dijo la máxima autoridad del país.

Para seguir avanzando en políticas efectivas que aborden esta problemática, la Jefa de Estado aseguró que se está trabajando en una estrategia nacional, liderada por el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), para entregar de forma oportuna soluciones a la población en temas de prevención, tratamiento, rehabilitación y reinserción social.

Sobre este mismo punto, la Presidenta señaló que el consumo de drogas es un asunto social que afecta principalmente a los sectores juveniles más vulnerables. Por esto, añadió, se reforzarán los programas de prevención universal y secundaria tanto a nivel local como escolar, familiar y laboral, privilegiando la perspectiva territorial y comunitaria.

“Una verdadera estrategia para enfrentar el consumo de drogas, debe ser abordada con una mirada integral, es decir que considere el trabajo con las personas, pero también en los entornos donde ellas se mueven. Y en esta labor, los colegios cumplen un rol esencial. Vamos a aumentar la prevención focalizada para evitar que niños y adolescentes entren en contacto con el consumo y las redes de distribución”, sostuvo.

Para cumplir este objetivo, agregó la Mandataria, se trabajará con equipos especializados en 290 establecimientos inicialmente, hasta llegar a lo menos a mil durante los próximos años. “Pretendemos atender a 4.500 jóvenes y sus familias”, afirmó.

Finalmente, recordó el compromiso que tenemos como país a la hora de enfrentar este flagelo. “El consumo de drogas no es sólo un problema que afecta a los individuos, sino a sus familias, a sus barrios y a toda la sociedad. Cada uno de nosotros está llamado a ser parte de las soluciones, para asegurar una sociedad más sana y un mejor futuro para nuestros niños, niñas y jóvenes”, señaló.