La educación es un derecho. Bajo esta premisa, Gendarmería está llevando a cabo un programa de estudios para los reclusos, de los cuales ya más de 1.800 han optado por tomarlo. Se trata de la continuidad de sus clases en 16 establecimientos que operan al interior de las unidades penitenciaras del organismo.

El periodo de matrículas se extenderá hasta este viernes, donde se espera que más internos terminen su educación, especialmente en Valparaíso que es considerado uno de los mejores centros, puesto que más de 1.200 reos asisten a una de las tres escuelas o el liceo técnico Cardenal Oviedo.

“Me hace falta estudiar. Tengo hijos grandes y ellos necesitan que yo sepa para también poder enseñarles a ellos. Las oportunidades están y hay que aprovecharlas. Hay que ponerse las pilas porque a veces hay materia que a uno nunca le han enseñado, es difícil pero no imposible. El año pasado estuve aquí y saqué el primero y segundo medio”, dijo Eduardo Vega, quien asiste al Centro de Educación Integral de Adultos (CEIA).

Al respecto, el coordinador del departamento de educación de la Municipalidad de Quillota, Claudio Briceño, indicó que “vamos a tener una matrícula más o menos exacta a fines de este mes de marzo. Tenemos una deserción escolar que está dentro de lo normal para un establecimiento penitenciario y se da por las libertades o cambio de unidades. Son los menos quienes no quieren venir a clases”.

La oferta educacional en Gendarmería va desde cuarto año básico hasta cuarto año medio. Además se informó que una vez egresados de su último año, los internos tendrán la posibilidad de rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU) y posteriormente postular a algún centro de educación superior.