A través de un intenso plan de fiscalización, la Municipalidad de Viña del Mar ha logrado erradicar 15 mini casinos ilegales en la comuna, figurando entre los últimos, el conocido centro de juegos electrónicos “Samoa”, ubicado en pleno centro de la ciudad.

Clausura Samoa 02Bajo el decreto alcaldicio Nº 1215, funcionarios del departamento de Inspección Comunal y Carabineros de Chile, clausuraron este antiguo recinto que posee giro de “Juegos Electrónicos y Confites”, cuya patente comercial no contaría con el ejercicio de actividad comercial de “Máquinas Tragamonedas”.

“Estamos procediendo al cierre de todos los locales que contengan máquinas de azar en la comuna, las que expresamente no están autorizadas según lo consigna la ley, pues las que funcionan, tanto en este tipo de establecimientos, no tienen fiscalización y no pagan impuestos, lo que se traduce en un grave perjuicio para la ciudadanía, la que además, se ve expuesta a un negocio que no tiene ninguna clase de control”, señaló la alcaldesa Virginia Reginato.

Durante el cierre del recinto, el Director del Departamento de Inspección Comunal, Daniel Díaz, leyó el acta que notificaba dicha clausura, señalando que “por no contar con Patente Comercial que ampare el ejercicio de actividad comercial con Máquinas Tragamonedas, no se encuentra autorizado en su patente y no cuenta con ampliación de giro a las máquinas referidas, ejerciendo en consecuencia un giro comercial sin la autorización legal correspondiente”.

Asimismo, recalcó que los juegos de azar están generando graves conflictos de dependencia en la comuna. “Esta es una actividad, que sobretodo en la periferia, está generando una ludopatía bastante avanzada en menores de edad. Es un flagelo que lamentablemente, ataca de forma severa a la población más vulnerable”, dijo el directivo municipal.

“Samoa Entertainment”, que tiene más de 15 años de antigüedad, es considerado emblemático en la comuna por ofrecer servicios de video juegos y simuladores. No obstante, este último tiempo  explotaba 88  máquinas de azar, lo cual está prohibido expresamente por la legislación chilena.