Estado de las obras de reconstrucción del estadio viñamarino presenta un discreto 45 por ciento de avance, según reconoció el propio ministro de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle.

 Eduardo Poblete Araya

Panorámica del Sausalito hoy. El grado de avance de las obras de estadio viñamarino alcanza un discreto 45 por ciento. El proyecto original consideraba que en enero de este año, el nuevo estadio debiera estar en operaciones.

Panorámica del Sausalito hoy. El grado de avance de las obras de estadio viñamarino alcanza un discreto 45 por ciento. El proyecto original consideraba que en enero de este año, el nuevo estadio debiera estar en operaciones.

La historia de cuándo abrirá sus puertas el “remodelado” o “reconstruido” estadio Sausalito, se asemeja a esas malas teleseries que en los años 70 y 80, buscaron lavarle el cerebro a los chilenos en una época oscura de nuestra historia. Pareciera que los guionistas de dichos culebrones, cambiaron de rubro y hoy tienen manga ancha para cambiar a su antojo, la fecha definitiva de entrega de los trabajos del principal recinto deportivo de la ciudad jardín, provocando confusión y molestia incluso en las propias autoridades regionales y comunales, que ya no hayan qué decir cuando son consultados por algo más concreto con respecto al Sausalito.

Tuvo que ser el ministro de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, quien pusiese un poco de orden ante tanta incertidumbre, justo a tiempo para evitar el escándalo por el cual ya se acerca todo lo que rodea el evidente atraso en las obras del recinto deportivo. “Calculamos que para junio o julio, es decir, con un rango de atraso de más o menos 90 a 120 días, Sausalito podrá abrir sus puertas. Reconocemos que hubo más de algún inconveniente en los trabajos, pero esto no pasó por un tema de financiamiento. Los dineros siempre han estado disponibles, aseguró el secretario de estado, poniendo paños fríos en relación a quién debía colocar los más de $ 2 mil millones restantes para financiar los trabajos de estadio.

Estas platas serán aportadas de manera conjunta por el Instituto Nacional del Deporte (IND-Chiledeportes) y el municipio viñamarino, descontados de fondos sectoriales destinados a infraestructura deportiva. El gobierno regional, a través del CORE (Consejo Regional), ha reiterado que no colocará un peso más a los más de $ 9 mil millones ya aportados para la reconstrucción del estadio.

Ante ello, el nuevo Sausalito tendrá un costo cercano a los $ 13 mil millones, un 20 por ciento más del presupuesto originalmente calculado.

GALERIA ABAJO

El sector de tribuna oficial es la única estructura completa casi en su totalidad del proyecto global de remodelación del Sausalito. Claro que ello no alcanza siquiera al tercio de las obras que deben acometerse en el nuevo recinto deportivo viñamarino.

El sector de tribuna oficial es la única estructura completa casi en su totalidad del proyecto global de remodelación del Sausalito. Claro que ello no alcanza siquiera al tercio de las obras que deben acometerse en el nuevo recinto deportivo viñamarino.

Hoy el Sausalito presenta un discreto 45 por ciento de avance en sus obras, que contrasta de manera evidente con la situación del estadio Elías Figueroa Brander de Valparaíso. Este último, con un 93 por ciento de avance en su construcción global, abrirá las puertas al público la penúltima semana de febrero. Si bien igual hubo un atraso en la ejecución de las obras, al estar bajo el alero de Chiledeportes, el recinto porteño no debió padecer los vicios de la burocracia administrativa que frenaron la construcción del nuevo Sausalito.

Uno de los factores que retrasó las obras del estadio viñamarino fue la incertidumbre por el destino de la galería laguna. Dañada considerablemente por el terremoto del 27 de febrero del 2010, increíblemente la unidad ejecutora de las obras del Sausalito –es decir, el municipio- desestimó la posibilidad de demoler ese sector. La posterior realización de un estudio técnico emanado por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, reiteró la lógica: Demoler dichas tribunas. “Efectivamente, estábamos a la espera de ese estudio, el cual nos confirma que el sector (de galería) Laguna se demuele, lo que alterará el cronograma de trabajos en un margen de 90 a 120 días”, reconoció Ruiz-Tagle, quien no entró en detalles respecto de lo tardío de este estudio.

VIÑA SERÁ SEDE

Ruiz-Tagle también aclaró que este nuevo atraso en los trabajos del estadio viñamarino, en ningún caso ponen en riesgo la postulación de Viña del Mar como sede de los dos eventos futbolísticos internacionales proyectados en nuestro país: La Copa América y el Mundial Sub-17 masculino, ambos a realizarse el próximo año.

“Viña del Mar no corre riesgo alguno de perder su condición de sede tanto para la Copa América como para el Mundial Sub-17. En obras de esta envergadura, es natural que se produzcan ciertas alteraciones en su calendario original. La empresa a cargo de los trabajos en Sausalito (Besalco S.A.) nos ha asegurado que cumplirá con la entrega de las obras a más tardar en julio del presente año”, señaló el también empresario papelero, quien no descartó la eventual aplicación de multas por el retraso de los trabajos del estadio.

CONTRASTES

Las autoridades dialogan sobre el futuro de Sausalito. Junto al ministro de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, aparecen la alcaldesa de Viña Virginia Reginato; el diputado recientemente electo, Osvaldo Urrutia; el presidente de la ANFP Sergio Jadue, y el nuevo director de Secpla Viña, el ex seremi de vivienda Matías Avsalomovich.

Las autoridades dialogan sobre el futuro de Sausalito. Junto al ministro de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, aparecen la alcaldesa de Viña Virginia Reginato; el diputado recientemente electo, Osvaldo Urrutia; el presidente de la ANFP Sergio Jadue, y el nuevo director de Secpla Viña, el ex seremi de vivienda Matías Avsalomovich.

El presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Sergio Jadue, también se hizo presente en Sausalito para ver el estado de avance de las obras. La máxima autoridad del fútbol chileno no ocultó cierto grado de preocupación por lo que observó en Viña. “Nos habíamos hecho la idea que el panorama era diferente (en Sausalito). Claramente las comparaciones son odiosas con lo que pudimos ver en Valparaíso, donde el avance es notorio y dicho estadio está pronto a su reapertura. Pero se nos explicaron los factores técnicos que han demorado los trabajos  y nos quedó la tranquilidad que en diciembre de este año, el estadio de Viña del Mar estará plenamente operativo, con lo cual no hay riesgo alguno para la realización de la Copa América y el Mundial Sub-17 en el 2015”.

Como una forma de respaldar a Viña del Mar como sede tanto de la Copa América como del Mundial Sub-17, Jadue anunció que en diciembre de este año, la ciudad jardín acogerá el sorteo del torneo continental, en el Hotel del Mar. “Esperamos definir pronto la fecha definitiva del sorteo, en coordinación con la municipalidad de Viña del Mar, para recibir como corresponde a los dirigentes de las federaciones de todo América, como a los entrenadores de las selecciones participantes”, subrayó el máximo regente del balompié chileno.

En julio de este año, con otras autoridades, otro gobierno, Sausalito –cuya aforo será de 24.965 espectadores- debiera poner fin a una pésima teleserie cuyos guionistas se esmeraron en difundir un libreto demasiado confuso y oscuro. Se espera que en el séptimo mes del año, no sólo el estadio esté listo; que también haya claridad de las reales razones que motivaron su criticable e inexplicable retraso.