Como parte de un la operación internacional de inteligencia, el Servicio Nacional de Aduanas decomisó en el puerto de San Antonio más de 280 mil pares de anteojos de sol y 13.500 jockey falsificados y de contrabando, mercancías que habían sido embarcadas en el puerto chino de Ningbo y que tenían como destinatario una empresa importadora de la comuna de Estación Central, en Santiago.

El embarque fue descubierto gracias a las alertas emanadas desde la Oficina Regional de Enlace de Inteligencia (RILO) de las aduanas de Sudamérica –con sede en Valparaíso- y el trabajo de la Unidad de Análisis de la Aduana de San Antonio, cuyos profesionales hicieron seguimiento del barco donde venía el contenedor sospechoso y lo separaron apenas llegó a Chile para revisarlo en detalle, justo cuando comienza la alta demanda de este tipo de productos asociada a la época estival.

Este importante y millonario decomiso de productos que además de perjudicar a las marcas involucradas también pone en riesgo la salud de los ciudadanos, se gestó en el marco de la operación internacional “Tigre III”, iniciativa desarrollada durante las últimas semanas y que fue coordinada por la Organización Mundial de Aduanas (OMA) con la participación de 20 países Latinoamericanos y más de 23 puertos.

A través del aforo físico del contenedor marcado por los análisis de riesgo, se encontraron un total de 280.650 unidades de anteojos de sol que imitaban a modelos de las prestigiosas marcas Ray-Ban y Oakley, artículos que venían sin sus logotipos y dentro de 884 cajas.

Sin embargo, en dos cajas aparte fueron hallados 300 mil logos de estas mismas marcas, los que se pegan con posterioridad en los marcos de los anteojos para completar las falsificaciones, acción que se están convirtiendo en una nueva forma de ingresar productos falsos a los países. Esta parte del decomiso corresponde a un valor aduanero de casi $80 millones.

Asimismo, en este mismo cargamento se detectaron otras 45 cajas con 13.500 unidades de jockey falsos imitando las marcas NBA, Monster, DC, NY Yankees, Billabong y Volcom, por un valor aduanero de más $9 millones.

Matías Somarriva, abogado de la oficina Sargent & Krahn que representa a las empresas afectadas, explicó que “las falsificaciones provocan daños a la marcas pues los consumidores las asocian con productos de pésima calidad, lo que en definitiva incide negativamente en los atributos de las marcas comerciales. En el caso de los anteojos falsificados, existen pruebas que demuestran que pueden provocar severos daños a la salud de las personas por la mala calidad de los lentes”.

Respecto al trabajo de los analistas y fiscalizadores de Aduanas, el profesional destacó que su labor “es vital en este tipo de casos. Nuestra experiencia ha sido muy positiva y debemos destacar el profesionalismo de los funcionarios de Aduana, quienes constantemente son capacitados para poder detectar e impedir el ingreso de productos falsificados al país”.

Somarriva explicó que ahora el estudio jurídico tomará las acciones penales que corresponde por los “delitos de falsificación y uso malicioso de marca comercial en contra del consignatario de los productos y de todos los que resulten responsables”.

En tanto, el Servicio también se querellará en contra de los responsables de la importación ilegal de estas mercancías falsificadas, persiguiendo responsabilidades por los delitos de contrabando e infracción a las leyes de propiedad industrial vigentes en Chile, acción que será interpuesta por los abogados de la Administración de Aduanas de San Antonio ante el Juzgado de Garantía de dicha ciudad.