El archipiélago de Juan Fernández se caracteriza por tener una alta cantidad de flora endémica, la que lamentablemente se ha visto deteriorada por la irrupción de los primeros asentamientos humanos, aumentando su fragilidad debido a la inclusión de especies alóctonas (que tienen un origen foráneo) como los conejos, roedores, chivos y vegetación invasora como la zarzamora, que ha causado un daño irreparable producto de las condiciones favorables para su desarrollo que presenta la localidad.

Con el objetivo de enfrentar esta dramática situación y evitar así la extinción de muchos de estos ejemplares nativos, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) firmó un Convenio de Cooperación con la Fundación Jardín Botánico Nacional de Viña del Mar, el cual permitirá traer las plantas amenazadas a la Ciudad Jardín, donde se reproducirán y luego se enviarán de regreso a los viveros administrados por la institución forestal en el archipiélago.

En esa línea, el Director de Conaf en la Región de Valparaíso, Pablo Mira, explicó que a través de esta iniciativa “los expertos y los botánicos del Jardín viajan a la isla, recogen todo el germoplasma de las semillas, las reproducen y luego son enviadas a nuestros viveros en el archipiélago”. Acotó que con esta acción “estamos asegurando la supervivencia de todas las especies”.

Finalmente, sostuvo que “la idea es tener a todas las especies también representadas aquí en el continente”, y puntualizó que ahora hay 40 de las 130 que se proyecta llegarán al Jardín Botánico.

Por otra parte, Alejandro Peirano, Director de Indap en la Región de Valparaíso y Representante Legal de la Fundación Jardín Botánico Nacional de Viña del Mar, manifestó que “tenemos un Plan Maestro de desarrollo en este jardín y dentro de este plan se enmarca este convenio, en el que acordamos pasos a seguir para mantener la diversidad en Juan Fernández, respetar el medioambiente y poder traer un ‘pedacito’ del archipiélago acá”.

Agregó que se invertirá en este espacio, con el objetivo de entregar las “condiciones medioambientales necesarias y que las plantas que traigamos de allá no vengan a sufrir, sino que se desarrollen en un ecosistema muy parecido al que tienen en el archipiélago”.

Respecto a la trascendencia que se le pretende dar a este proyecto, Peirano aseveró que “lo que buscamos es que esta medida sea de largo aliento, que este convenio siga adelante y no sea cosa de que cualquier directivo que llegue a futuro cambie las normas. Por esta razón hemos fijado normas que sean sustentables y duraderas en el tiempo, para que nadie las objete”.

El seremi de Agricultura, Francesco Venezian, en tanto, expresó que “esta iniciativa tiende a perpetuar en el tiempo las especies exóticas que mantiene Chile, multiplicarlas para poder reforestar posteriormente y, por supuesto, mantener algunas de ellas en el continente”.

“El mundo entero hoy en día está protegiendo sus especies nativas y nosotros con este paso queremos ratificar la importancia que Chile le da a esta labor”, agregó.

Por último, Venezian hizo un llamado a apoyar financieramente este tipo de proyectos, pues se necesita “infraestructura y especialistas que puedan resguardar estas especies nativas”.