Autoridades reconocieron incremento cercano al 20 por ciento, explicando que ello se debe a modificaciones absolutamente necesarias para que el recinto cumpla con los requisitos para ser subsede de la Copa América 2015

 Eduardo Poblete Araya

Panorámica del sector central del nuevo estadio Valparaíso. Entre las obras que restan por ejecutar están la reposición de la pista atlética, colocación de butacas, sistema de iluminación, tablero marcador de goles y el empastado de la cancha.

Panorámica del sector central del nuevo estadio Valparaíso. Entre las obras que restan por ejecutar están la reposición de la pista atlética, colocación de butacas, sistema de iluminación, tablero marcador de goles y el empastado de la cancha.

El tema de los estadios de Valparaíso y Viña del Mar, sigue dando que hablar. Si bien es cierto, el avance de los trabajos del recinto deportivo porteño es cercano al 75 por ciento –su obra gruesa está terminada-, el incremento en el costo final de la obra generó controversia entre los miembros del Consejo Regional (CORE), sobre todo cuando el propio Ministerio de Desarrollo social, invocó un Incumplimiento de Normativa (I.N.), haciendo notar este reajuste de los costos.

En concreto, de los $ 11 mil 190 millones que costaría levantar el nuevo estadio “Elías Figueroa Brander” de Valparaíso, se subirá a $ 13.708 millones. Los montos extras se deben a equipamiento extra y consultorías, justificadas según las autoridades, por la postulación de la ciudad-puerto como subsede de la próxima Copa América a efectuarse en nuestro país el 2015, para dejar al recinto porteño con un aforo cercano a las 25 mil localidades.

Efectivamente, hay un I.N. que puso el Ministerio de Desarrollo Social, pero se refiere a que van a haber obras adicionales por más de un 10% del costo inicial. Eso no tiene ninguna importancia desde el momento que el financiamiento de ese exceso sobre el 10% está garantizado y ese financiamiento adicional lo va a poner el nivel (gobierno) central. No veo porqué, por una cosa tan mínima, se genera una discusión, en circunstancias que lo que debiésemos celebrar es que Valparaíso recupera un estadio después de más de 75 años sin remodelaciones importantes, en mucho mejor forma de lo que era su estructura original. En definitiva, el costo final del estadio debiera bordear los $ 13 mil millones, que representa un aumento del 11% del costo original, que incluye las obras adicionales y cuya diferencia será cubierta por el nivel central”, señaló el intendente regional, Raúl Celis, quien junto al subsecretario de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, realizaron junto a otras autoridades y a Elías Figueroa (ver recuadro), una visita inspectiva para comprobar el grado de avance de las obras de coloso porteño.

DINEROS GARANTIZADOS

El subsecretario de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, calificó como una cifra “pequeña y razonable” los más de $ 2 mil millones extras que el Estado deberá desembolsar para cubrir los costos del nuevo estadio de Valparaíso. “Quiero agradecer al Consejo Regional (CORE) su preocupación por el tema del gasto. Sin embargo, el mayor costo por estos incrementos en la capacidad de ambos estadios, fue absorbido por el gobierno de Chile, por especial instrucción del Presidente Sebastián Piñera. De tal manera que la contribución de gobierno de Chile fue mucho mayor de la que se había conversado originalmente”, señaló Ruiz-Tagle.

Hubo que incrementar los costos para que la región de Valparaíso pudiese garantizar su participación en este torneo. De tal manera que esta intervención adicional, ha significado un pequeñísimo incremento en sus costos, más que razonable”, añadió la máxima autoridad deportiva de país.

Ruiz-Tagle también aclaró que estos más de $ 2 mil millones, está cubiertos en la ley de presupuesto de 2014. “Por cierto que los dineros para terminar la construcción de los estadios, están asegurados en la ley de presupuesto, incluyendo los arrastres correspondientes. Recalco que estos estadios fueron ampliados en su capacidad, de cara a la postulación de Viña y Valparaíso para la Copa América del 2015. Y esa es una consideración importante a la hora de definir el tiempo de atraso de cualquiera de estos proyectos, que es algo más que razonable en obras de esta envergadura”, explicó.

INAUGURACION PARA ENERO

El subsecretario de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, minimizó las críticas por el incremento en el costo final de la construcción del nuevo estadio “Elías Figueroa Brander” de Valparaíso.

El subsecretario de deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, minimizó las críticas por el incremento en el costo final de la construcción del nuevo estadio “Elías Figueroa Brander” de Valparaíso.

Respecto de la inauguración del nuevo estadio porteño, tanto Ruiz-Tagle como Celis, coincidieron en que a fines de diciembre o la primera quincena de enero del 2014, asoma como la fecha más adecuada para el corte de cinta. “No quisiera dar una fecha exacta de la inauguración del estadio Valparaíso, porque siempre hay un proceso de autorizaciones administrativas, que tiene que ver con la recepción de las obras y algunos plazos que escapan a veces al término mismo de las obras civiles y especialidades. De todas maneras, hablamos de plazos cercanos a fines de este año o los primeros días del 2014, aunque evidentemente, estamos en presencia de una obra cercana a su término”, aventuró el subsecretario.

Celis refrendó los dichos de Ruiz-Tagle: “El estadio tiene un grado de avance cercano al 75% y esperamos que a fin de año pueda estar en condiciones de ser terminado. La idea es que el estadio sea inaugurado en enero del 2014, de acuerdo a lo conversado con la empresa constructora (Grupo Claro Vicuña Valenzuela), lo que indica que se está dentro de los plazos presupuestados”.

¿Y SAUSALITO?

Sobre la delicada situación del estadio Sausalito, ambas autoridades describieron el panorama del principal recinto deportivo viñamarino. Al respecto, Gabriel Ruiz-Tagle reconoció que “han existido algunos retrasos en ese proyecto, pero de cualquier forma, ese estadio va a estar en funciones el 2014, pensando en su posibilidad de ser sede de la Copa América del 2015. No quiero aventurar una fecha, porque no quiero revelar temas que se hablaron con la Municipalidad de Viña del Mar, que es la entidad ejecutora de las obras del Sausalito”.

Celis en tanto, dijo que el atraso de los trabajos del estadio viñamarino, fue analizado en conjunto con el municipio de la ciudad jardín. “En el caso del Sausalito, evidentemente ha habido un mayor retardo. Ese retraso se conversó con el municipio de Viña del Mar, a objeto de aunar esfuerzos para acelerar los tiempos. Hay que recordar que la entidad ejecutora de las obras del Sausalito es la municipalidad, a diferencia del estadio Valparaíso donde es el IND cumple dicho rol, con lo cual hace que los procedimientos sean más sencillos”.

El intendente regional esbozó una velada crítica al municipio de Viña por las dificultades que ha habido en Sausalito. “Como gobierno regional, estamos preocupados por el atraso de los trabajos, porque lo importante es que los estadios estén terminados en los plazos establecidos. Se han hechos todos los esfuerzos posibles pero el retraso de las obras no es imputable al gobierno regional, recordando que es el municipio de Viña del Mar la entidad ejecutora de los trabajos. Si bien ambos estadios fueron proyectados en plazos similares, Sausalito siempre estuvo pensado para ser entregado a fines de enero o comienzos de febrero del 2014”, cerró la máxima autoridad regional.