Después de funcionar por años en una antigua casona del Cerro Alegre, el Club Deportivo “New Crusaders” cuenta con moderna sede para reunirse, realizar actividades para toda la comunidad del sector y practicar básquetbol.

El nuevo espacio del decano del básquetbol en Valparaíso, fue inaugurado esta tarde por el alcalde de la ciudad, Jorge Castro, socios, vecinos y amigos del club deportivo en el que participan más de 200 personas, entre niños, jóvenes y adultos.

La construcción de la sede alcanzó una inversión de $49.500.000 financiados por el Gobierno Regional ($34 millones y medio) y la Municipalidad de Valparaíso ($15 millones). La nueva infraestructura de tres pisos, cuenta con salas de oficina, de multiuso, baños, camarines, y patio.

En la ocasión, el presidente del “New Crusader”, Mario Pizarro, expresó que “nosotros fundamos el básquetbol en la década de los 80´. Pero el club entro en una recesión y estuvo 25 años inactivo. En el año 2010 un grupo de ex jugadores y ex dirigentes decidimos reactivarlo y en 3 años, gracias al apoyo de la Municipalidad de Valparaíso y del Gobierno Regional logramos reconstruir la sede y articular nuevamente toda la competencia con los menores”.

En ese sentido, Pizarro agregó que actualmente tienen alrededor de 90 jugadores de todas las edades y en las categorías damas y varones. “En lo deportivo nuestra meta para los próximos cuatro años es ser campeones sudamericanos con las Damas y en los social estamos trabajando con niños del Sename y de un colegio de extrema vulnerabilidad que es el Jorge William”.

Por su parte, el alcalde Castro sostuvo que “este club es el Decano del Básquetbol, y está instalado en el corazón del cerro Alegre formando parte de los atractivos especiales que tiene la ciudad de Valparaíso. Estamos contentos porque el Crusader está renaciendo tras estar por muchos años sin funcionamiento. Sin duda, con esta reapertura se agradece y destaca el trabajo de los dirigentes y del presidente Mario Pizarro que ha logrado entusiasmar a la comunidad del sector y también postular proyectos para sacar adelante el club. De esta manera estamos a la espera de ver en competencia al Crusader y de ver a todos los vecinos del sector comprometidos con su club nuevamente”.

El más emocionado en la ceremonia fue el socio fundador del “New Crusader”, Mario Cancino, más conocido como “El Bambino”. “Todos los viejos del cerro estamos muy emocionados porque ahora que el club volvió a funcionar recordamos que cuando el Crusader jugaba los domingo, el cerro se despoblaba y en el Fortín Prat decían que este club es una familia. Con mis 83 años nunca pensé ver a mi club activo, por eso me siento muy emocionado”, señaló.

Cabe señalar que con la primera parte del proyecto de reactivar el “New Crusaider” culminada, los dirigentes del club darán paso a la segunda fase que consiste en techar y adecuar el piso del patio donde practican básquetbol los jugadores.