La actriz de Hollywood, Lindsay Lohan, conocida más por sus excesos y numerosos problemas que como actriz, decidió responder a las preguntas de una de las presentadoras más famosas de la televisión estadounidense, Oprah Winfrey, quien en un programa transmitido el domingo admitió sus problemas a las drogas y al alcohol.

En la entrevista, la conductora le pregunto sobre su adicción a las drogas, en donde la actriz afirmó que el alcohol es su mayor adicción, declarando también que “yo soy mi peor enemigo y ahora ya lo sé y lo reconozco”.

La actriz afirmó que se sentía feliz con todas sus adicciones y el caos que constantemente la rodeaba, pero inconscientemente estaba deseando estar en prisión para encontrar algo de paz.

Lohan, quien ha estado innumerables veces en centros de rehabilitación, en marzo pasado se declaró culpable tras un accidente automovilístico ocurrido en 2012, esto para no ir a la cárcel, de forma que fue enviada a rehabilitación por tres meses.

Es así como la problemática mujer declaró que se encuentra en un espacio mental distinto y prometió mantenerse lúcida y concentrada. “Me siento totalmente nueva y tengo tal deseo de mantener esta sensación y quedarme así, que estoy dispuesta a hacer lo que sea”, finalizó.