Aprender técnicas en carpintería, yeso y policromía para la restauración, conservación de inmuebles, monumentos y espacios públicos de valor patrimonial de la ciudad puerto es el beneficio al que podrán acceder, gratuitamente, un grupo de 90 jóvenes vulnerables y de diferentes personas interesadas en restauración, que participen en la Escuela Taller Municipal “Nasro Maluk”.

Esta iniciativa es impulsada por el municipio de Valparaíso- a través de la Dirección de Gestión Patrimonial- gracias a aportes de la Comunidad Económica Europea.

La Escuela Taller fue inaugurada este martes en la capilla Buen Pastor de cerro Placeres, lugar donde se realizan los talleres y que este primer semestre convocaron a 25 alumnos.

El alcalde Jorge Castro destacó el importante espacio de capacitación que esta escuela genera para la comunidad en materia de restauración.

“Tenemos una Escuela Taller que tiene un primer impulso de la Comunidad Económico Europea y que tiene su similar en la ciudad de Colonia de Uruguay y una concursabilidad  que nos dio la posibilidad de tener los recursos para partir. Asimismo, hemos tenido la donación en el sector de calle Serrano de un inmueble donde esta escuela tendrá su sede, luego de la recuperación. Es un muy buen inmueble el que se nos ha donado para que esta escuela parta con todo en lo referente  a los desafíos de ser una ciudad patrimonio. Es decir, en cuanto a oficios de carpintería, piedra y así poder enseñarlos  y capacitar a la gente  de nuestra ciudad”:

El objetivo para el año 2014, dijo el jefe comunal,  es realizar estos talleres en la escuela pública que existe actualmente en la cárcel porteña.

Por su parte, la encargada de Patrimonio del municipio de Valparaíso, Paulina Kaplan indicó que en la Escuela Taller, como primer paso,  «se están haciendo los talleres en madera, arreglándose las bancas y puertas de la iglesia. Mientras que para el segundo semestre,  vamos a seguir trabajando acá en lo referido a yeso y ornamentaciones. Éste es un espacio donde los jóvenes vulnerables van a aprender estos oficios que les permitirán trabajar luego en la restauración de la ciudad”.

Miriam Gárate es una de las alumnas que participan de la Escuela Taller y para quien esta experiencia ha sido muy positiva, ya que le ha permitido capacitarse en un área completamente desconocida.

“Por casualidad me enteré de este proyecto y me interesó mucho, porque me dan la posibilidad de especializarme en madera y además estás aportando a al comunidad.  Es una muy buena experiencia, ha sido extraordinaria, porque sin saber nada, he ido aprendiendo y he tenido conocimiento en estos talleres en madera”.

La Escuela Taller nace como una necesidad en la ciudad de contar con mano de obra calificada en diversos oficios tradicionales para la ejecución de proyectos de restauración de inmuebles y espacios públicos y privados de valor patrimonial. Ello, luego de que la ciudad fuera declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO el año 2003.